Varios medios de comunicación han tratado de contactar con el entorno de la cantante en las últimas semanas, a raíz de los inquietantes mensajes que la artista publicó hace un mes en redes sociales, y que fueron seguidos de su desaparición hasta hoy.

Socialité averiguó esta semana que la artista se ha refugiado en su casa familiar de Irún, tratando de alejarse del foco mediático y de las redes sociales. Mientras medios como El Español han contactado con el entorno de la cantante obteniendo una escueta respuesta: «va mejor y está bien».

Amaia Montero atraviesa una etapa delicada que le ha sobrevenido justo a las puertas del lanzamiento de su nuevo trabajo. No obstante, la música es la gran motivación de la artista, e incluso su propio entorno asegura que será ese nuevo disco lo que hará que pueda agarrarse a la ilusión del lanzamiento y salir poco a poco del pozo en el que se encuentra.

Ambos medios mencionados citan la muerte del padre Amaia, ocurrida en 2009, como el origen de sus problemas anímicos, asegurando que a pesar del tiempo pasado, la artista nunca ha superado aquel golpe.

Sea como sea, pese al silencio oficial, el entorno de la cantante ha querido tranquilizar a los fans, desvelando también que Amaia Montero se encuentra en Irún rodeada de un montón de amigos y familiares que están ayudándola a superar el bache, y que necesita atravesar este proceso de espaldas al foco mediático que habitualmente recae sobre ella, tanto por su popularidad, como por las eternas polémicas entre fans que la persiguen desde su salida de La Oreja de Van Gogh.

La artista ha sido en el pasado objeto de burlas y críticas por su aspecto físico, algo que también puede relacionarse con la polémica y alarmante fotografía que ella misma publicó en Instagram antes de su desaparición.