Revólver vuelve a triunfar gracias a su Instinto Básico
Cada grupo tiene sus rutinas en cuanto a la grabación de directos. Algunos desaparecen sin haber grabado ninguno, otros se conforman con uno solo en toda su carrera, y otros -cada vez más- regalan a sus fans una nueva vuelta de tuerca a su repertorio grabando en vivo en diferentes formatos cada pocos años. Para estos últimos lo más difícil es elegir el momento, entre disco y disco, de grabar un directo. Hasta ahora, Revólver ha acertado siempre con el momento para grabar y editar un nuevo Básico, quizá como un ritual que recuerda que todo comenzó con aquel primero y con canciones como Tu noche y la mía, Esclavo de tu amor o Si no hubiera que correr.
Revólver sobrepasa la media de directos, con una teoría tan personal como interesante, que ha expuesto en alguna ocasión a los lectores de Popes80. Una de las últimas, en 2013, con motivo de su maravilloso Enjoy: «Yo amo profundamente los discos en directo. Si por mi fuera grabaría un disco en directo de cada gira que he hecho. Un repertorio distinto, una banda distinta, todo, me parece maravilloso, porque esos discos reflejan un momento con una sensibilidad y con una tensión muy concreta de los músicos. Pero hay gente en este país que se queja porque saco “otro” disco en directo. ¿Pero a ver? No lo entiendo. Neil Young debe tener 20 discos en directo y no pasa nada. Qué manía con el “¿otro más?”. A mí me gustan los discos en directo. Aquí no hay costumbre de grabarlos. Cualquier banda grande tiene uno o ninguno, y alguna habrá por ahí que tenga dos, pero no es lo corriente».
Y por si alguien tenía dudas sobre si está visión sobre los disco en directo es adecuada para Revólver, no hay como volverse hacia cualquier tienda de discos y hacerse con el último, el Básico IV. No hay duda: Revólver, que parece guiarse por un instinto especial a la hora de tomar estas decisiones, ha vuelto a acertar con el momento y el formato.
La historia de Revólver puede recorrerse a través de sus singles, de sus giras, de sus discos más importantes, o desde el conjunto cronológico de sus discos. Pero hay una historia añadida en la trayectoria de Carlos Goñi que es digna de toda admiración y que es un gran regalo a sus seguidores más fieles: la de sus Básicos.
A continuación, el Básico IV de Revólver, otro imprescindible: