Que la Nochevieja se inunde de pop
Hace unos cuantos diciembres, aún me protegía de las masas eufóricas de Nochevieja al otro lado de la cabina. En la despedida del año, dos pinchadiscos nos turnábamos para la larga sesión pop de esa madrugada de lentejuela y brillantina. Naturalmente, a mi cargo estaba hacer sonar, uno tras otro, los éxitos del poprock español de veinte o treinta años atrás. Un recorrido que siempre efectuaba mezclando a los de ayer con los de ahora, porque es la manera en yo entiendo que debemos defender lo nuestro. Y tener perspectiva. Resulta obvio pero se olvida: las grandes canciones de ahora también serán los clásicos de mañana.
Disfrutaba más que ninguna otra aquellas sesiones de Nochevieja. Con las fiestas de Popes80.com, del 2002 al 2009 tuve ocasión de recorrer muchas cabinas, haciendo sonar la música de la que escribíamos en la revista ante un público de todas las edades, que así ha sido siempre nuestra audiencia. Sin embargo, la sesión de Fin de Año me gustaba más, porque se trataba de animar a un público que venía ya entregado a la causa. Era la noche de todas las grandes canciones, las estrellas y los hits, pero también de los clásicos más discotequeros que habían quedado en el olvido, y por supuesto de esos temas más gamberros e ingeniosos que salpicaban sonrisas de plata entre el vaho, los trajes largos y las corbatas de estreno.
Años más tarde una idea feliz me ha permitido emular aquellas sesiones. Me he tomado la molestia de rescatar de las viejas fundas de discos todo ese arsenal de arte pop que preparaba cada año específicamente para la Nochevieja. Todo, reunido con las canciones nuevas que hoy llevaría si me dispusiera a tomar los mandos de la música en cualquier fiesta de Fin de Año, hemos podido agruparlo en una lista de Spotify específica de Popes80 –los tiempos mandan- para esta celebración y entregárselo a los lectores, también a los pinchadiscos que un año más se enfrentarán a una de las noches más exigentes del año.
Al fin, manteniendo la costumbre de llevar en la maleta mucho más de lo que finalmente harás sonar, sumamos más de 450 canciones, o lo que es lo mismo, 28 horas y 42 minutos de fiesta del pop español.
Alaska, Loquillo, Los Ronaldos, 091, La Guardia, El Canto del Loco, Despistaos, Dorian, Los Planetas, Cooper, Los Secretos, Amaral, Celtas Cortos, Jarabe de Palo, Paraíso, Antonio Vega, Nena Daconte, Sabina, Leiva, Mikel Erentxun, Iván Ferreiro, Danza Invisible, La Unión, Café Quijano, Cómplices, Calamaro, Manolo Tena, Orquesta Mondragón, Pistones, Ariel Rot, Mecano, Love Of Lesbian, M-Clan, Modestia Aparte, La Casa Azul, Radio Futura, Kiko Veneno, Revólver, un Pingüino en mi Ascensor, Siniestro Total, Los Limones, Nacha Pop, Hombres G, Seguridad Social, Izal, Rosendo, Dinamita pa los Pollos, El Sueño de Morfeo, Rosana, Alarma!!!, Brighton 64, Los Elegantes, Olé Olé, Los Rebeldes, Los Rodríguez, Mamá, Pereza, Conchita, La Trampa, Vetusta Morla, Tequila, Luz Casal, Los Nikis… Si tras 28 horas de fiesta alguien necesita más canciones, es probable que le haya llegado la hora de acercarse a la churrería más próxima y meter la cabeza en el tazón de chocolate hirviendo.
Es cierto que ha sido un trabajo arduo y difícil, atenazado por el miedo a la injusticia o por el error en la compleja fórmula del gusto musical de los demás. Pero también lo es que esta iniciativa me dará la feliz oportunidad de estar, de algún modo, en muchas fiestas a la vez, que es algo que supera con creces mis cotidianas expectativas de una juerga de Nochevieja.